Un inglés demasiado optimista que se comió 18.000 camisetas

Leía el otro día la noticia de un empresario inglés que invirtió en 18.000 camisetas para conmemorar la "victoria" de la Selección de Inglaterra de fútbol en el mundial de Qatar.

No sé si lo sabes, pero Inglaterra ya fue eliminada en cuartos de final por Francia, lo que hace poco probable que vaya a ganar el Mundial.

El tema es que este empresario tuvo esa visión y quiso aprovechar la ocasión, tras ver el gran inicio de Inglaterra en el campeonato. Pero falló.

Ahora tiene 18.000 problemas en forma de camiseta en una nave industrial con el lema "Inglaterra, campeones del mundo 2022. El fútbol por fin ha vuelto a casa".

El mundo está anécdotas de este calibre.

Negocios que se van al garete por malas decisiones tomadas por sus dueños.

Las hay muy gordas, como esta, pero también las hay más pequeñas, que pasan desapercibidas para la sociedad, pero que suceden a diario.

Como las que cometen profesionales e incluso empresas que se encomiendan a la supuesta facilidad y accesibilidad que existe hoy en día para diseñar una web, como si de hornear una pizza de Casa Tarradellas se tratara...

Gente optimista que intenta crear de manera autónoma la web de su negocio para no tener que invertir demasiado dinero y, al final, se da cuenta de que se ha metido en un jardín...

Ha empleado su tiempo para, finalmente, tener que emplear seguramente también su dinero en un profesional que le solucione el marrón.

Esto ya lo he vivido unas cuantas veces.

Clientes que han llegado a mí hechos un manojo de nervios después de haber intentado montar ellos mismos su web y haber roto algo que no saben cómo arreglar.

Y es que montar la web de un negocio (no de un hobbie) requiere conocimientos de diseño, pero más importante que intentar darle a una web un aspecto exterior aceptable, es tener conocimientos técnicos o, al menos, saber lidiar con los más que seguros problemas que puedan surgir.

Fíjate si es complejo meterte en las tripas de montar una web corporativa, una tienda online, una academia o una membresía, por ejemplo, que yo mismo en muchas ocasiones tengo que contactar con el soporte de alguna herramienta para resolver problemas o dudas.

Y eso que tengo el culo pelao de diseñar webs...

Mira.

Crear (ya no digo diseñar) una web profesional es poca broma. Al menos si deseas obtener resultados.

La chicha, el magro, el juguillo de crear la web de tu negocio está más dentro que fuera. El trabajo de configuración y personalización interno que requiere una web es importante y una persona sin conocimientos suficientes se vería sobrepasado a la mínima que se encuentre con algo que no sabe cómo solucionar.

Por no hablar de lo que ocurriría si toca algo que no debe...

Y esto no solo es importante en el momento de crear la web antes de lanzarla al mundo. Una vez la web esté ya funcionando, pueden surgir nuevos problemas que habrá que ir resolviendo sin que la web deje de trabajar.

Pero no sufras.

Tu tranquilidad y saber que tu negocio estará en buenas manos desde el comienzo y en cualquier momento, no tiene precio.

Bueno, sí lo tiene, leñe... pero verás que no tiene por qué ser doloroso.

Un saludo.

CDixital.

PD: el próximo viernes 30 de diciembre te presentaré algo nuevo en lo que he estado trabajando estos últimos meses que te puede interesar si le estás dando vueltas a lanzar la página web de tu negocio y no lo tienes del todo claro. No te pierdas mis próximos artículos del blog, porque me da que te van a encajar muchas cosas...